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Las flores de diferentes tipos y colores eran las compañeras de vida de la guatemalteca María Candelaria Juan Sebastián en Los Ángeles, California, Estados Unidos, lugar al que llegó en busca de un mejor futuro desde Huehuetenango para ella y sus tres hijos; sin embargo, ahora su familia lamenta su asesinato, pero recuerdan todo lo que la hacía especial.
Los sueños de superación de la guatemalteca se acabaron la madrugada del 27 de febrero, cuando su vida se apagó y el presunto responsable de su asesinato, su esposo, quien ahora enfrenta un proceso de juicio, en medio del dolor su familia la recibió para darle sepultura acompañada de grandes arreglos florales en su lugar de origen.
En entrevista para La Hora Voz del Migrante, Pancholon familiar de María Candelaria relató parte de su vida en Guatemala y las razones que la llevaron a migrar.
Cuando la guatemalteca dejó el país buscaba una vida mejor para sus hijos y recordó que para la mayoría de las mujeres en Guatemala “no hay oportunidades porque existe mucha desigualdad en el campo laboral”.
El esposo de María Candelaria ya estaba en EE.UU., y su familiar explica que como suele pasar en muchos casos dejan a su familia para ir al Norte, se olvidan y no envían apoyo económico a sus hijos y esposa.
UNA MUJER CON MUCHA FE
Pensando en sus hijos, la connacional migró para buscar un mejor porvenir, aunque como casi todas las mujeres inmigrantes sufrió mucho en la travesía por México.
“María Candelaria Juan Sebastián era una mujer con mucha fe en Dios, una madre entregada a sus hijos. Doña Aurora quien era su patrona la califica como: Mujer de gran corazón, muy valiente, responsable y muy trabajadora”, recordó.
ELABORABA ARREGLOS FLORALES
La guatemalteca trabajaba en una floristería en el centro de Los Ángeles. Su labor consistía en hacer arreglos florales para diferentes eventos como: Bodas, aniversarios, XV Años, bautizos y también arreglos florales para diferentes funerarias en la Ciudad.
Ella trabajo seis años haciendo eso. Hacía bien su tarea, además, la conocían muchas personas y era muy apreciada por los dueños del local. En EE. UU., tiene un hermano, tíos y primos.
EL DÍA DE LA TRAGEDIA
Era la madrugada del domingo 27 de febrero y su hermano menor se había ido al trabajo, pero fue a las 04:00 horas, cuando su esposo Baltazar Castañeda, padre de sus tres hijos la agredió y le causó una muerte instantánea.
Pancholon menciona que el agresor no estaba tomado ni bajo algún tipo de droga.
“Hasta el momento nos seguimos preguntando cuales fueron sus motivos. También quiso agredir a la menor de 12 años. Los gritos de ella alerto y despertó al joven de 15. Fue quien peleo con su papa causándole una herida en la cabeza. Cuando perdió fuerza, el joven inmediatamente saco a su hermana y su hermanito se fueron de ese lugar. Los gritos de los menores alertaron a los vecinos que llamaron a la línea de emergencia”, mencionó.
Posterior a la tragedia fue trasladado hacia un hospital en donde se recuperó y el 1 de marzo tuvo su primera audiencia en una corte de Los Ángeles, California, ahí le dieron a conocer los cargos que se le imputan, entre estos: asesinato en primer grado, femicidio e intento de asesinato a una menor.
“El Juez le impuso una fianza de US$2 millones US$150 mil dólares para salir en libertad condicional. El proceso penal apenas comienza. Por ahora es todo lo que se sabe sobre el caso. La familia desconoce la fecha de una próxima audiencia”, relató el familiar.
DEJA UN VACÍO GRANDE EN EL CORAZÓN DE TODOS
La muerte de María Candelaria llenó de dolor a la familia de la guatemalteca en Huehuetenango, el proceso ha sido muy difícil.
“Deja un vacío grande en el corazón de todos. Somos creyente en Dios y lo primero es que Dios nos ayude a salir adelante con esta situación. Particularmente con los hijos de ella, cuyo caso sigue en una corte familiar. También se exige justicia, que la ley castigue al asesino”, manifestó.
UNA MUJER VALIENTE, DE FE Y UNA BUENA MADRE
A la familia le gustaría que se recuerde a María Candelaria como una mujer de fe, valiente y una buena madre y por eso harán lo posible para que su legado se mantenga en sus hijos y en todos los que la extrañan.
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VOLVIÓ A HUEHUETENANGO, EL LUGAR EN DÓNDE NACIÓ EN 1989
María Candelaria, nació y creció en Santa Cruz Barillas, Huehuetenango, vivió una época muy difícil por la guerra civil que atravesó Guatemala.
Para repatriar los restos de la guatemalteca, la familia solicitó apoyo de amigos, vecinos y otras personas que se unieron, muchos de ellos incluso de Santa Cruz Barillas y se encargaron de sufragar los gastos del sepelio.
El consulado de Guatemala en Los Ángeles ayudó en agilizar procesos para pasaportes, mencionó Pancholon, en un principio subraya que les habían recomendado una funeraria que les cobraba altos costos, pero finalmente encontraron otro lugar con el que obtuvieron un precio razonable.
“La familia Juan Sebastián expresa su profundo agradecimiento a todos los que brindaron apoyo moral, espiritual, económico y logístico para la repatriación de los restos de María Candelaria Juan Sebastián que ahora descansa en el cementerio general de Santa Cruz Barillas. La tierra que la vio nacer”, puntualizó.
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